¿Tiene los ojos secos, irritados, infectados o simplemente cansados de ver la televisión? Tus ojos te hablan. Y cuando escuecen, lloran o se enrojecen, es porque necesitan los cuidados adecuados. Ahí es donde entran en juego los colirios. Utilizados para aliviar, hidratar, desinfectar o tratar afecciones oculares, se han convertido en un elemento imprescindible de automedicación y prevención.
Más detallesEl colirio es mucho más que una simple gota en el ojo: es un tratamiento localizado de gran precisión, a menudo indispensable para aliviar los problemas visuales. A medio camino entre un medicamento y una solución reconfortante, actúa con rapidez, ataca la causa del problema y respeta la fragilidad del ojo. Ya se trate de una conjuntivitis, una alergia estacional, una sequedad debida al trabajo frente a la pantalla del ordenador o simplemente una necesidad de hidratación ocasional, existe un colirio específico para cada síntoma.
Detrás de cada fórmula hay valores sólidos: seguridad, esterilidad, eficacia y máxima tolerancia. Estos son los pilares que guían el diseño de cada producto de esta categoría. Y es lo que le garantiza, cada día, unos ojos más tranquilos, más calmados y mejor protegidos.
No existe un colirio universal, sino una multitud de soluciones oftálmicas, cada una adaptada a un problema muy específico. Esta diversidad permite responder de forma específica a las distintas afecciones oculares, desde una simple molestia hasta problemas más graves. He aquí un resumen de los principales tipos de colirios que encontrará en esta categoría:
Cada producto está cuidadosamente formulado para garantizar una tolerancia óptima, una acción rápida y un uso seguro, incluso para las personas sensibles y los niños.
Aunque pueda parecer inofensivo, hay algunas reglas esenciales que deben seguirse al instilar colirios para garantizar su eficacia y evitar la contaminación. He aquí lo que debe hacer para sacar el máximo partido a su tratamiento ocular:
Estos sencillos pasos le garantizarán un tratamiento seguro, higiénico y, sobre todo, eficaz.
No siempre es fácil saber qué colirio elegir, sobre todo cuando se presenta una combinación de síntomas: hormigueo, enrojecimiento, lagrimeo, sequedad, etc. Ahí es donde entra en juego la experiencia de su farmacéutico. Él o ella pueden ayudarle a distinguir los signos de una simple molestia ocular de las afecciones que requieren consejo médico.
Éstas son algunas de las cosas que su farmacéutico le aconseja con frecuencia:
El farmacéutico también está ahí para indicarle los gestos adecuados, recordarle las precauciones y sugerirle los formatos más adaptados a su uso diario (frasco, pipeta, monodosis, etc.).
Los colirios son esenciales... pero no lo hacen todo. Al mismo tiempo, adoptar algunas prácticas naturales e higiénicas puede marcar la diferencia en el confort y la resistencia de sus ojos. He aquí nuestras recomendaciones naturistas:
Estos métodos suaves, que no tienen efectos secundarios, refuerzan los efectos del colirio y favorecen la salud general de la visión.
En nuestra vida cotidiana hiperconectada, nuestros ojos están sobreexigidos. Frente a este estrés visual constante, las gotas oftálmicas ofrecen una respuesta suave y específica, pero potente. Calman, limpian, protegen y cuidan los ojos sin ser agresivos. Al incorporarlas a su rutina, está tomando la decisión de preservar su confort visual, prevenir complicaciones y mantener sus ojos claros, brillantes y sanos.
Sea cual sea su problema -sequedad, infección, alergia, postoperatorio- hay un colirio adecuado listo para aliviar sus ojos. Esta categoría está aquí para orientarle, tranquilizarle y, sobre todo, ofrecerle soluciones prácticas. Así que no espere a que sea demasiado tarde: cuide sus ojos hoy, de la forma más fácil.
Los factores externos, la fatiga visual y las infecciones pueden afectar a la salud de sus ojos. Descubra nuestra selección de eficaces tratamientos oftalmológicos sin receta para un alivio rápido.